Ficha Técnica/Artística y Sinopsis
Cruella es un filme norteamericano basado en el personaje Cruella de Vil, personaje central de la novela de 1956 de Dodie Smith, “Los ciento y un dálmatas”, y en el largometraje animado homónimo de Walt Disney Pictures. De toda la saga, esta última versión es un largometraje que utiliza la tecnología del Live-Action -con personajes reales sobre fondos 3D, creados por computadora-, y ha sido producida por Disney en 2021. Fue dirigida por el director australiano Craig Gillespie a partir de un guion de Dana Fox y Tony McNamara. Cuenta con la interpretación de Emma Stone, como Estella-Cruella y Emma Thompson como la Baronesa Von Hellman, en los papeles principales. En los roles coadyuvantes trabajan Joel Fry, Paul Walter Hauser, Emily Beecham y Mark Strong.
La película está ambientada en la Londres de los años ’70 en medio de la revolución del punk rock. El personaje principal, Estella, es una joven con mucha imaginación y creatividad que quiere crearse un nombre como diseñadora de modas. Por fuerza del destino, ella hace amistad con un par de jóvenes ladronzuelos con quienes construye una vida en los suburbios de Londres. Un día el talento de Estella llama la atención de la Baronesa Von Hellman, una leyenda del diseño de indumentaria, pero con el tiempo el vínculo entre ambas se vuelve más y más tirante, hasta que Estella abraza su lado rebelde y cambia su nombre por el de Cruella.
Características del neobarroco en “Cruella”
Omar Calabrese menciona en La era neobarroca algunas características de la estética posmoderna, entre ellas “el exceso y el límite”, “la cita” y la “casi nada”. A continuación, haré un breve análisis de la moda y la banda musical de “Cruella” a la luz de estos conceptos vertidos por Calabrese en su libro.
El límite
“El carácter de una tensión al límite de las reglas que hacen homogéneo un sistema, se observa un poco en todos los campos del saber contemporáneo: desde el arte a la ciencia, desde la literatura hasta el comportamiento individual, desde el deporte hasta el cine.” (CALABRESE, pág.67)
Estella es un personaje que pone en tensión las reglas durante toda la película. Por su comportamiento rebelde la echan de la escuela, desobedece las órdenes de su madre de quedarse en el auto y provoca un caos en la fiesta de disfraces de la baronesa. El hecho de vivir en los suburbios y ganarse la vida como carterista también es una forma de tensar los límites y salirse del centro, de la ley y de las reglas. La ropa, el peinado y el maquillaje de Estella denotan permanentemente su carácter rebelde. “Cruella” asocia creatividad, inteligencia e imaginación con rebeldía y tensión de los límites impuestos por la ley. El carácter rebelde se transforma en un valor positivo en “Cruella”.
El exceso
“El exceso, precisamente como superación de un límite y de un confín, es sin duda lo más desestabilizador. Por una parte, cualquier acción, obra o individuo excesivo quiere poner en discusión cierto orden, quizá destruirlo o construir uno nuevo. Por otra, cualquier sociedad o sistema de ideas tacha de exceso lo que no se puede ni desea absorber.” (CALABRESE, pág 75)
Es evidente que la lucha entre la Baronesa y Estella tiene que ver con el confrontamiento entre lo antiguo y lo nuevo, entre la clase obrera y la aristocracia, entre lo central y lo excéntrico, entre el orden y el caos, entre lo moderno y lo posmoderno. Pero lo excesivo lo encontramos, asimismo, en la estética de la película. Estella rediseña la vidriera delantera del Liberty Department Store -tienda londinense fundada en 1875 en estilo art Nouveau y William Morris-, utilizando la escritura con marcadores coloridos de una forma desordenada y caótica – efecto conocido como Sketched Background-, mientras que las posiciones que adopta el maniquí son extremas y muy poco convencionales para la época, remitiendo a las vidrieras atrevidas de Eric Lucking.
Desde pequeña, su ropa presenta adornos excesivos, como zapatillas escritas y camperas de jean con cientos de tachas, botones y alfileres de gancho. Sus zapatos favoritos son los llamados “creepers” (zapatos color negro con plataforma), y su cabello naturalmente presenta dos tonos, el blanco y el negro, aunque ya de adulta se lo tiñe de color vino. La guerra entre Estella y la Baronesa se da, principalmente, en el ámbito de la moda. Ambas luchan por la primera posición en creatividad y originalidad en sus vestimentas, pero Estella, por su edad e imaginación, gana esta carrera.
La indumentaria de Estella remite a una influencia directa del movimiento punk londinense, evolucionando hacia estilos más próximos a los ’90 e inicios del 2000, como el llamado Trash, que aparece en pantalla cuando ella viste un top de papel de periódico con una larga falda hecha de retazos de diferentes tejidos descartados por la industria, inspiración de John Galliano.
Por su parte, la baronesa organiza un baile de disfraces en la que sus invitados llevan trajes imitando los vestidos de falda sobre corsés del siglo XVIII, como los que vestían las mujeres de la aristocracia en Versalles. Sin embargo, en el día a día, la baronesa es muy Chanel y Dior, vistiendo tonos tranquilos como los marrones y grises que evolucionan hacia los dorados y plateados. Para la velada en blanco y negro, luce un vestido en estos colores. Sus trajes llevan cortes diagonales en 45 grados - Corte al Bies– o terminan a la altura de los hombros en forma de curvas y volados.
En cuanto a la música, el verdadero exceso se encuentra en la gran cantidad de temas elegidos para acompañar las imágenes y crear atmósfera. La banda sonora ha sido enriquecida con estilos musicales tales como Heavy Metal, Glam Rock, Hard Rock, Punk Rock, Gothic, R&B y pop, de artistas británicos y norteamericanos como Queen, David Bowie, The Clash, Rolling Stones, Supertramp, Ike & Tina Turner, Georgia Gibbs, Nancy Sinatra. Una curiosidad: uno de los temas especialmente compuestos para la película por Nicholas Britell se titula: “The Baroque Ball” (“El Baile Barroco”).
Por último, el exceso se aprecia en el Diseño Gráfico y el Diseño por computadora utilizado para crear fondos y efectos en la película. Se puede apreciar estos efectos 3D en los titulares de Diarios y Revistas con diferentes tipografías y colores que han sido sobreimpresos en algunas escenas, como si las palabras de los titulares salieran “volando” en un espacio paralelo, y al mismo tiempo superpuesto al universo de la narración.
La cita
Calabrese explica que la cita es un “instrumento para una reescritura del pasado (…) el artista hace algo más: renueva el pasado. Lo que significa que no lo reproduce, sino, al contrario, tomando formas y contenidos esparcidos como desde un depósito, lo hace nuevamente ambiguo, denso, opaco, poniendo en relación los aspectos y los significados con la modernidad.” (CALABRESE, pág. 194)
En efecto, el hecho de que Cruella sea el último filme de una larga saga que se inicia con una novela, de por sí habla de la cita como renovación del pasado. Cruella lleva en sí misma todas las versiones anteriores, pero en clave posmoderna. Citas son también la moda, que recrea los estilos de grandes modistos y la música, que trae del pasado al presente una enorme lista de cantantes y grupos musicales de los años 1970.
El vestido con tachas doradas que inventa Cruella contiene una reminiscencia de la colección de 2010 de Alexander McQueen. Su reinterpretación en la película cambia los brillos y las lentejuelas por vainas de polillas. Lo irónico de esta secuencia es que las polillas acaban destruyendo el mismo vestido de donde nacieron.
Vestido rojo inspirado en el diseño “Tree” de Charles James. Foto: Cortesía de Disney
El vestido rojo que viste Estella en el baile de blanco y negro es una cita del diseño “Tree” de Charles James, 1955. Ese vestido también simboliza una forma de rebeldía contra las reglas establecidas, ya que todos los invitados debían estar vestidos en los dos colores convenidos por la anfitriona. El vestido de esta última, en este mismo baile, está inspirado en un Dior de 1949 mientras que la ropa de Cruella manejando una motocicleta recuerda a un diseño de Teary Mugler de 1997, y así podría mencionar muchos otros ejemplos.
Otra forma de cita del pasado es la moda vintage que Artie exhibe en su tienda de Portobello Road, en Notting Hill. Él le presenta a Estella modelos de Dior y Chanel.
La “casi nada”
“Hoy en día parece haber vuelto un nuevo apogeo no tanto de la Nada, como de su versión barroca más sofisticada, es decir, el tema de la llamada ‘annihilatio’ (…) la ‘reducción a la nada’ de las figuras, mediante cancelación, cobertura, quemadura. No se trata exactamente de eliminación de la figura en favor de lo abstracto, como en otros momentos del experimentalismo europeo, sino de un verdadero trabajo de aniquilamiento”. (CALABRESE, pág.184)
Podemos ver cuatro momentos clave en la película, en los que se evidencia claramente esta tendencia del neobarroco posmodernista respecto del aniquilamiento. La primera tiene lugar cuando la Baronesa arroja al vacío a la madre adoptiva de Estella desde un acantilado en plena penumbra nocturna, la segunda es cuando la Baronesa manda quemar la casa de Estella con sus habitantes dentro, atentado del cual la joven creativa se salva por muy poco, la tercera ocasión se da cuando Estella (devenida en Cruella) asiste a la soirée en blanco y negro, con un vestido rojo y una capa blanca. La capa desaparece gracias a los efectos visuales de fuego destructor que es posible utilizar con la tecnología actual aplicada al cine.
Por último, cuando Cruella sale vencedora de la batalla entre las dos “Emmas” se dirige al castillo de la Baronesa Von Hellman y, en ese umbral entre el exterior y el interior de los jardines, el cartel “Hellman” pierda sus últimas tres letras, para convertirse en “Hell” (Infierno). En ese momento Cruella llega a su Infierno. Pero éste ya no aparece vinculado al fuego sino al vacío. El interior de la mansión se muestra completamente vacío de información, de muebles, indumentarias e, incluso, de luz. El único personaje que queda es ella hablando consigo misma: “y ahora, ¿qué?”.
Los temas musicales “El Mago” del grupo Black Sabbath (1970) y “Simpatía por el Diablo” de los Rolling Stones (1968) acompañan las dos últimas secuencias y sirven como una especie de anticipación del descenso al Infierno del personaje central.
Su triunfo sabe a derrota en esta verdadera reducción a la “casi nada” del final.
La diseñadora de moda de “Cruella” es la británica Jenny Beavan, quien ganó el Oscar al Mejor Diseño de Vestuario por su sensacional trabajo en la pesadilla distópica de George Miller Mad Max: Fury Road (2015). Anteriormente había obtenido una estatuilla por la película A Room with a View (1985) había sido nominada ocho veces más por los largometrajes: The Bostonians (1984), Maurice (1987), Howards End (1992), Lo que queda del día (1993), Sentido y sensibilidad (1995), Anna y el rey (1999), Gosford Park (2001) y El discurso del rey (2010).
Estella-Cruella presenta 47 diferentes indumentarias en la película, incluyendo ropa vintage, adquiridas en Portobello Road, Londres y en la gran feria vintage “A Current Affair” en Los Ángeles y en Brooklyn, Nueva York.
Cruella con chaqueta militar reformada y falda de pétalos. Foto: cortesía de Disney
En otra escena, Cruella está en el techo de un auto con una falda larga roja y un abrigo con caballos y carruajes en miniatura sobre sus hombros. Este abrigo es una obra de arte dijo Beavan en una entrevista para la Revista Vogue. Luego explica que rehicieron el abrigo que habían encontrado, para enriquecerlo con adornos por todas partes. Respecto a la falda, Beavan recuerda que el objetivo de la falda de fieltro era hacer juego con el auto de la Baronesa. Tenía que ser un vestido con chaqueta militar modificada y falda de pétalos, suficientemente grande y liviano para que Estella pudiera usarlo, pero también lo suficientemente pesado como para poder cubrir el auto con ella.
Kirsten Fletcher, junto a sus estudiantes, cosieron a mano pétalo por pétalo, llegando a la cantidad de 5.060 pétalos en total.
Tal como dijimos en la primera parte de este trabajo, el aspecto de la Baronesa von Hellman es muy diferente al de Cruella.
"Está fuertemente influenciado por Dior y ella es un poco anticuada, un poco de los años ‘50 y ‘60. Es una buena diseñadora, aunque está desactualizada, por lo que Cruella puede entrar con este nuevo y más divertido enfoque de la moda”, explica Jenny Beavan.
Los trajes clásicos de la Baronesa. Foto: Cotesía de Disney
Esa baronesa tenía un verdadero sentido del estilo y eso se podía entrever en su trabajo. Beavan trabajó con una diseñadora de moda llamada Jane Law, que tiene un taller en Worthing, en la costa sur de Inglaterra. Beavan iba a su taller con un auto completamente lleno de tela, lo tiraban todo en el suelo y luego ambas cubrían los maniquíes con esas telas hasta obtener los trajes y vestidos para la Baronesa. Entonces pedían a Emma Thompson que se probara toda esa ropa.
Existen en la película muchas otras referencias a estilos y diseñadores conocidos: el Punk de los ’70 en Londres tuvo como características la subcultura Punk Fashion Rebelde, que consistía en ropas con telas Animal Print, chaquetas de cuero ajustado, zapatos de plataforma y botas. El uso de botas de cuero negro en la pantalla ha sido acompañado por la canción feminista estilo pop y country de los años ‘70: “This boots are made for walking” de Nancy Sinatra.
Estella en la tienda de Artie. Foto: Cortesía de Disney
En la tienda de ropa vintage de Artie ubicada en Portobello Road, en el barrio de Notting Hill (barrio que alberga una célebre feria callejera y donde se celebra anualmente el Carnaval) hay en exhibición un vestido Chanel 1955 y otro Dior. En su escaparate vemos un vestido rojo creado en el taller de la baronesa que, como ya dijimos, está inspirado en el diseño “Tree” de Charles James de 1955.
El mismo Artie es, en sí mismo, una cita de David Bowie. Es un personaje intersexual, que no se identifica con el género masculino ni con el femenino. Justamente la canción de David Bowie que escuchamos en el filme se titula: “Boy´s Keep Swinging” y su letra asegura que “la mujer gobernará en el futuro”. Por eso Cruella, hacia el final de la película, aparece con un tatuaje en el rostro que dice: “Future”. El futuro es para los jóvenes rebeldes, creativos y atrevidos que vienen a cambiar el mundo, especialmente si se trata de mujeres.
El concierto final punk y demoníaco, también es un desfile de moda inspirado en Vivienne Westwood de 1985. Los vestidos de la baronesa años’50 y ‘60 están basados en los vestidos de Christian Dior, pero luego llegó Yves Saint Laurent para revolucionar esa moda.
Jasper y Horace, los amigos de Estella, visten ropa inspirada en Vivienne Westwood y McLaren de los ’80. La ropa femenina moderna y atrevida creada por Cruella toma ideas de Alexander McQueen, John Galliano y Stella McCartney.
Concierto Final en la pasarela. Cruella luce un abrigo que imita la piel del perro dálmata. Foto: Cortesía de Disney
Detalles de la Banda Sonora en “Cruella”
La banda sonora recopila una variedad de éxitos de rock británico y americano de los años ‘60 y ‘70. Las actuaciones de Emma Stone como la propia Cruella de Vil, y Emma Thompson como la Baronesa Von Hellman, están perfectamente acompañadas por la convincente combinación de música rock, R&B, pop y punk que subraya la narrativa de los personajes, así como los puntos clave de la trama. Si bien puede causar controversia que Disney haya decidido convertir todas tus películas animadas en películas de acción en vivo, esta película ciertamente logra mucho con la selección de música que la acompaña. La música subraya, acompaña y también funciona como una fuente más de sentido, apoyando al lenguaje visual – cinematográfico.
Actuando como una secuela (o tal vez precuela) del clásico animado “101 Dálmatas”, “Cruella” muestra la infancia de Estella, una niña precoz a la que le gustan los perros, y cómo ella crece hasta convertirse en el ícono del título.
La película transcurre durante el movimiento punk rock de la década de 1970 en Londres, y Cruella encuentra su lugar en la ciudad como una aspirante a diseñadora de moda que está en guerra con la clase alta londinense y, en particular, con la baronesa von Hellman, una célebre diseñadora que comparte una secreta historia que involucra a la madre adoptiva de Cruella.
A medida que demuestra su genio artístico a lo largo de la película, Cruella se embarca en una misión de venganza, desafiando al sistema y a la baronesa. La música que respalda la transformación de Estella en Cruella es el punk de los ‘70 que sentó las bases para el heavy metal y el grunge.
Treinta y tres canciones lanzadas a lo largo de las décadas de 1960 y 1970 aparecen en la banda sonora y van desde el funk clásico hasta las poderosas baladas feministas. La banda sonora es capaz de crear una fuerte sensación de tiempo y lugar, gracias a su variedad, centrándose en la música beat británica de la década de 1960, aquella por la cual los Beatles han sido reconocidos.
También en la banda sonora se encuentran algunos de los principales éxitos de la de bandas británicas famosas como The Zombies, The Rolling Stones y The Animals. Todo es ineludiblemente inglés y, más que eso, ineludiblemente la música de Londres desde el inicio de su apogeo funciona como el subrayado perfecto para la transformación de Estella Miller en Cruella de Vil.
“Cruella” comienza con un clásico éxito antisistema tomado directamente de la década de 1970 en Londres. El ritmo constante de "Bloody Well Right" de Supertramp suena durante la secuencia de los primeros años de Estella en la escuela primaria. Estella, como muchos artistas de la época, desafió el estricto sistema escolar británico y, en cambio, abrazó su naturaleza salvaje. La actitud rebelde de Estella se refleja en la letra inicial de la canción: "Entonces crees que tu educación es falsa, supongo que es difícil no estar de acuerdo. Dices 'Todo depende del dinero y de quién esté en tu árbol genealógico' ".
"Whisper Whisper"
, de los Bee Gees (1969), es una canción de rock progresivo extraída de lo que se considera el mejor álbum de Bee Gees de la década de 1960. Suena en la sala de cine cuando la madre de Estella, Catherine, lleva su auto a una mansión donde espera obtener ayuda financiera.
“The Baroque Ball” (El baile barroco). Esta canción del compositor Nicholas Britell presenta una voz femenina encantadora mientras Estella se infiltra en el baile de disfraces de la baronesa.
"Inside Looking Out" ("Mirando hacia adentro") por “The animals” (1966). Este tema de blues rock inicia la primera escena de acción de la película, con un ritmo implacable que comienza cuando Estella es atrapada causando estragos en el baile de disfraces de la Baronesa von Hellman y sigue avanzando mientras los infames dálmatas son liberados para perseguirla a ella y a su madre adoptiva, Catherine. La secuencia culmina con la muerte de Catherine.
“Watch the Dog that Bring the Bone” ("Cuidado con el perro que trae el hueso") de Sandy Gaye (1969). La banda sonora comienza a ponerse funky cuando Estella se muda a Londres, con el conmovedor sencillo de Gaye creando una vibra de "nada en la vida es gratis". La canción acompaña una escena en la que Estella huye de la policía y establece una conexión duradera con sus compañeros de la calle Jasper y Horace y, como beneficio adicional, combina con la aparición del perro de Estella, ya adulto, y de los dálmatas de la Baronesa.
“She is a rainbow” ("Ella es un arcoíris") por The Rolling Stones (1967). Diez años más tarde, una melodía moderna y maravillosa sirve como introducción a la adulta Estella, que está ayudando a Jasper y Horace a realizar complejas estafas diseñando disfraces de alta costura. El genio artístico de Estella, que se muestra en la pantalla con una explosión de colores, también se refleja en la letra de la canción en este verso: "Viene en colores por todas partes. Se peina. Es como un arcoíris".
"Time of the Season" por The Zombies (1968). La entrada de Estella en el mundo de la moda a través de los almacenes londinenses Liberty va acompañada de esta conocida canción pop psicodélica... para terminar en decepción cuando el público y Estella descubren que la talentosa joven ha sido contratada como conserje.
“These Boots are made for Walkin’” (Estas botas están hechas para caminar"), de Nancy Sinatra (1965). Estella, que comienza a exhibir tendencias de carácter que la convertirán, eventualmente, en Cruella de Vil, canta junto a este popular tema country mientras decide abandonar su trabajo en un ataque de borrachera y rebelión, destruyendo y rediseñando la ventana delantera del Liberty. Es un tema cuya letra es esencialmente feminista.
“Five to One” ("Cinco a uno") por The Doors (1968). Esta canción de R&B que bordea el hard rock acompaña la entrada de la Baronesa, la mejor diseñadora de moda de Londres que, al ver la renovación hecha en el escaparate de la tienda, contrata a Estella en el acto antes de su caótica huida de la policía.
“Feeling Good” ("Sentirse bien") de Nina Simone (1965). Este estándar del jazz suena cuando Estella entra en la Casa de la Baronesa, reflejando su placer visceral de triunfar.
"Fire" (“Fuego”) de los Ohio Players (1974). Cruella toma otro giro hacia el funk justo antes de que Estella conozca a Artie, con el sonido distintivo nuevamente marcando un momento importante de transición en su vida cuando ve un vestido rojo en la vidriera “vintage” de Portobello Road.
“The Wild One” ("La salvaje") de Suzi Quatro (1974). El himno feminista de Quatro es la primera canción de la película que abraza al movimiento punk rock de la década de 1970, época en la que se desarrolla gran parte de la película. La letra de la canción dice: "No puedes sujetarme. Soy la salvaje", mientras Cruella hace su entrada en el baile en negro y blanco de la baronesa. La canción funciona como una introducción para la nueva villana Cruella de Vil, quien eventualmente se convierte en un ícono punk por derecho propio.
Cruella con tatuaje "The Future". Foto: Cortesía de Disney
"Livin' Thing" de la Electric Light Orchestra (1976). La música orquestal de cuerdas da paso al rock suave del exitoso sencillo de ELO, combinando con el caos total que desciende sobre el baile de la baronesa cuando Horace choca contra un pastel y las ratas son liberadas.
"Stone Cold Crazy" de Queen (1974). El ritmo frenético y la letra lunática de "Stone Cold Crazy" son una combinación obvia para el estado de ánimo de Cruella mientras se aleja a toda velocidad de la fiesta de la baronesa. Habiendo descubierto que la baronesa asesinó a su madre, Cruella se está volviendo un poco loca.
“Car Wash” ("Lavado de autos") de Rose Royce (1976). La famosa melodía disco establece un ritmo constante para acompañar a Jasper, Horace y Cruella mientras van a trabajar. La canción también subraya la escena del secuestro de los dálmatas y el reclutamiento de Artie en el grupo que intentará recuperar el collar de Catherine.
"Boys Keep Swinging" de David Bowie (1979). Un examen detallado de la escena del rock londinense no estaría completo sin un homenaje a David Bowie, cuyo “look” parece haber inspirado al personaje de Artie.
“One Way or Another” ("De una forma o de otra") de Blondie (1978). Como suele ser el caso en las películas, esta poderosa canción de punk-pop se vuelve siniestra mientras reproduce un montaje de Cruella que se embarca en una misión para destruir a la baronesa y apoderarse del mundo de la moda.
Banda Sonora de “Cruella”. Foto: Cortesía de Disney
“I Get Ideas (When We Are Dancing)”: "Tengo ideas (cuando estamos bailando)" de Tony Martin (1951). Una balada romántica se vuelve literal cuando a la baronesa le surge la idea de robar el diseño del vestido de Cruella.
“Should I Stay or Should I Go” ("Debería quedarme o debería irme") por The Clash (1981). Cruella alcanza la cumbre del punk cuando el sencillo de The Clash acompaña una escena en la que el personaje de Stone convierte en alta costura los retazos de tejidos recuperados de la basura.
“I Love Paris” en la versión de Georgia Gibbs (1953). La canción escrita por Cole Porter aporta algo de humor al trabajo sucio que Jasper y Horace cumplen mientras hacen girar un detector de metales sobre las heces de uno de los perros dálmata, al deducir erróneamente que estos perros se han tragado el collar de Catherine.
“Love is like a violin” ("El amor es como un violín") de Ken Dodd (1960). La exuberante música de la década de 1940 hace una aparición sorpresa en “Cruella” cuando la baronesa se atribuye el mérito de un vestido diseñado y creado por Estella. La escena crea cierto contraste entre los dos personajes femeninos: mientras que Estella está enamorada de la moda, la baronesa parece estar enamorada del poder y del estatus.
“I Wanna Be Your Dog” ("Quiero ser tu perro") en la versión de John McCrea. “Cruella” renueva su enfoque en los perros con una versión original de este éxito proto-punk de 1969. La canción de la banda The Stooges suena durante la secuencia de la victoria de Cruella, acompañando el desfile de moda final en el parque, después de que Cruella destruyera el evento de moda formal de la baronesa. Esta escena también marca la primera aparición del famoso abrigo dálmata de Cruella (que, según esta película, no está hecho con piel de perro).
"Smile" por Judy Garland (1963). La arrolladora versión de Garland del clásico de jazz de 1961 de Nat King Cole ofrece un sorprendente contraste con una escena en la que Cruella está al borde de la muerte. La canción presagia el rescate de Cruella después de que la baronesa prende fuego a su casa y la deja morir. Es el momento de la película en el que el público se pregunta si hay esperanzas para Cruella y sus amigos.
"Come Together" de Ike y Tina Turner (1970). La banda sonora de Cruella continúa rindiendo homenaje a la historia del rock británico con una versión de la canción principal del famoso álbum de 1969 de The Beatles, Abbey Road. La canción suena mientras Cruella y sus amigos literalmente regresan juntos, reagrupándose para su ataque final a la baronesa.
“The Wizard” ("El mago") de Black Sabbath (1970). Esta canción de la banda inglesa Black Sabbath aparece en escena cuando Cruella observa el cartel de entrada en el que está escrito: “Hellman Hall” mientras se transforma en otro donde se pueden distinguir las palabras: “Hell Hall” (Salón del Infierno).
“Sympathy for the Devil” ("Simpatía por el diablo") de The Rolling Stones (1968). Otro éxito de los Rolling Stones invita a la audiencia a sentir simpatía por el diablo cuando Cruella se convierte oficialmente en Cruella de Vil. La joven que otrora fuera un personaje mitad heroína, mitad villana, se convierte en el final en una completa villana. Esta es la canción final antes de los títulos de cierre.
“Call me Cruella” de Florence + the Machine (2021). Esta canción original ha sido compuesta especialmente para la película. Corresponde con los títulos de cierre y es su tema principal. Pone un punto final a esta historia original de acción en vivo de la productora Disney.
"Cruella de Vil" de Mel Leven (1961). En una escena posterior a los créditos, Disney rinde homenaje a los “101 dálmatas” originales, el célebre largometraje animado de 1969, al hacer que Kayvan Novak cante un verso de "Cruella de Vil".
Bibliografía:
FUKAI, Akiko, SUOH, Tamami, IWAGAMI, Miki. Historia de la Moda. Del siglo XVIII al siglo XX. La colección del Instituto de la Indumentaria de Kioto. Editorial Taschen. Bibliotheca Universalis. Colonia, Alemania, 2021.
CALABRESE, Omar. La era neobarroca. Cátedra Signo e Imagen, Madrid, 1994
GALLUP, Jasmine. Cruella Soundtrack Guide: Every Song in the Movie, ScreenRant on-line magazine, Quebec, 2021. URL: https://screenrant.com/cruella-movie-soundtrack-songs/
SETH, Radhika. How Emma Stone Became Everyone’s Favourite (Impossibly Stylish) Supervillain. Vogue UK, 2021. URL: https://www.vogue.co.uk/arts-and-lifestyle/article/jenny-beavan-cruella-interview
LAWRENCE, Gregory. All 33 'Cruella' Needle Drops, Ranked. Collide on-line-magazine, Quebec, 2022. URL: https://collider.com/cruella-soundtrack-list-ranked/